MADRID 3 May. (EUROPA PRESS) –
Las proyecciones elaboradas a partir del recuento de voto real en las elecciones legislativas celebradas este sábado en Australia apuntan a una clara victoria del Partido Laborista que lidera el primer ministro en funciones, Anthony Albanese.
En concreto, la proyección otorga a los laboristas 68 escaños, muy cerca de los 76 de la mayoría absoluta, mientras que la Coalición Liberal-Nacional de Peter Dutton obtendría solo 29. Las demás candidaturas no superan los cuatro. Con estos datos ya es imposible que la Coalición forme gobierno, destacan los medios de comunicación australianos.
El Partido Laborista ha logrado mejorar sus resultados en numerosas circunscripciones, incluidas algunas de las que se consideraban tradicionalmente como vinculadas a los conservadores y se ha impuesto en la mayoría de las zonas consideradas en disputa.
Un claro indicio de que será una victoria laborista sin paliativos es que Peter Dutton es el primer líder de la oposición que no obtendrá escaño en su circunscripción, Dickson, por lo que la Coalición quedaría descabezada en el Parlamento.
Mientras, en la sede laborista en Sídney se corea ya el nombre de su líder: «¡Albo! ¡Albo! ¡Albo!», informa la televisión pública australiana ABC.
Albanese llegó al poder en el año 2022 augurando aires de cambio, procedente de una familia de clase trabajadora de Darlinghurst, un suburbio de Sídney. Sin embargo, el precio de la vivienda sigue aumentando a pesar de sus promesas, lo que ha dificultado en cierta medida su campaña electoral.
A pesar de las crecientes críticas vertidas contra el Gobierno, los laboristas se han colocado como la opción más plausible para lograr la victoria, especialmente debido al rechazo a las políticas del presidente estadounidense, Donald Trump.
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