Madrid (EFE).- La Caja Mágica, el recinto donde se celebra el Masters 1.000 de Madrid, abrió este martes sus puertas con normalidad, gran afluencia de público desde una hora antes del inicio de la jornada y máxima expectación por los aficionados al tenis ante una jornada maratoniana de partidos.
Tras el apagón eléctrico sufrido en la península ibérica, que obligó a suspender casi toda la jornada precedente, la Caja Mágica abrió sus puertas a las 11:00, una hora después de lo previsto debido a algunos problemas con los suministros que fueron subsanados.
Minutos antes de la apertura de las puertas ya había gente organizándose en filas para entrar al recinto, en cuyo interior todos los puestos de restauración comenzaron a funcionar con normalidad a la espera de sus clientes.
Hasta el inicio de los partidos, a las 12:00 (10:00 GMT), la gran mayoría de los aficionados bajaron a presenciar en las pistas exteriores los entrenamientos de los tenistas, que estuvieron preparándose desde una hora antes para los primeros partidos de la jornada.
Gran parte de los aficionados llegaron andando desde el metro de San Fermín-Orcasur, del que se vio salir a muchísimos aficionados que después bajaron andando por la Avenida de los Fueros. Esa decisión de la gente se notó en el tráfico de coches, menor que en anteriores jornadas.
A las 12:00, sin retraso, comenzaron los partidos con gran afluencia de público en las gradas en las cinco pistas de juego.
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