Karim Khan, fiscal jefe del Tribunal Penal Internacional (TPI), ha anunciado este viernes que se aparta temporalmente de su cargo hasta que concluya una investigación externa sobre la presunta agresión sexual de la que le acusa una exasistente. La denuncia por esos hechos se produjo el año pasado, poco antes de que Khan solicitara en mayo a los jueces del TPI que emitieran órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y contra su entonces ministro de Defensa, Yoav Gallant. Este viernes, portavoces del tribunal han confirmado que Khan —que niega categóricamente las acusaciones— ha remitido un correo electrónico al tribunal indicando su decisión de dejar por ahora su puesto.
Esta decisión del fiscal más conocido de la justicia penal internacional llega en un momento de gran tensión en el seno del TPI. En octubre de 2024, el propio Khan pidió al denominado Mecanismo de Supervisión Independiente (IOM, en sus siglas inglesas) del tribunal que abriese una investigación interna sobre su señalamiento por supuesta conducta indebida. Se trataba de un presunto acoso sexual e intento de coacción a una asistente, pero el caso no progresó por falta de denuncia de la mujer. Como eso podía responder a la falta de confianza de la afectada en el procedimiento, la Asamblea del TPI, el órgano legislativo y de supervisión en el que están representados los Estados que lo integran, solicitó una investigación externa. Khan “ha comunicado su decisión de hasta que haya concluido”, reza el comunicado emitido por el tribunal. “Los fiscales adjuntos se ocuparán de gestionar la Fiscalía durante su ausencia”.
La acusación dice que Khan habría intentado coaccionar durante un año a una asistente para tener relaciones sexuales, así como de haberla tocado contra su voluntad, según informa la agencia AP. Dos compañeros de trabajo en los que confió la mujer denunciaron la presunta conducta indebida al organismo independiente de control del tribunal. Después de varios días de investigaciones, ella decidió no presentar una denuncia. El fiscal también fue interrogado entonces.
El pasado febrero, el presidente estadounidense, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva imponiendo sanciones al tribunal debido a las investigaciones de la Fiscalía sobre Israel, uno de sus aliados más estrechos. Tanto Estados Unidos como Israel rechazan la competencia del TPI, del que no forma parte, pero investiga los presuntos crímenes de guerra cometidos por Israel y por Hamás en Gaza, tras el ataque perpetrado por esta última el 23 de octubre de 2023.
Este jueves, Khan había comparecido por videoconferencia ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para informar de la situación en Libia, un país que tampoco forma parte del TPI. “Existe lo que podría describirse como una caja negra de sufrimiento en la costa mediterránea que nadie ha querido abrir”, dijo, refiriéndose a los centros de detención libios.
Khan es un jurista británico, de padre paquistaní y madre británica, y ha sido tanto abogado defensor como fiscal en la justicia internacional. En 2018, el secretario general de la ONU, António Guterres, le nombró jefe del equipo encargado de investigar los crímenes cometidos por el Estado Islámico (ISIS, en sus siglas en inglés) en Irak. En 2021 fue elegido fiscal jefe del TPI para un periodo de nueve años.
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