La Paz (EFE).- El presidente de Bolivia, Luis Arce, anunció este sábado que su Gobierno prepara una denuncia internacional por el ataque atribuido a seguidores de Evo Morales contra una ambulancia que llevaba personal de salud y policías heridos, en medio del conflicto para forzar la candidatura del exmandatario en las próximas elecciones.
En una declaración a los medios, Arce lamentó que el viernes en la noche una ambulancia «ha sido prácticamente asaltada con hechos vandálicos, con resultados nefastos» para «las personas que estaban dentro, tanto el personal médico como los heridos».
«Esto es absolutamente reprochable y vamos a hacer la denuncia internacional al respecto, porque no puede ser que en nuestro país, so pretexto de una candidatura absolutamente injustificada e inconstitucional, estén tomando este tipo de acciones contra el personal médico que lo único que hace es cumplir su deber», al igual que la Policía, manifestó.
La ministra de Salud, María Renée Castro, denunció en sus redes sociales que el viernes una ambulancia de la seguridad social «fue atacada, volcada e incendiada mientras trasladaba a cuatro pacientes heridos» en un punto de bloqueo de rutas en la región central de Cochabamba, donde se concentra la mayoría de las protestas.
«Los bajaron a la fuerza, los golpearon, agredieron al conductor, a la doctora y a una enfermera. Por momentos temimos lo peor. Gracias a una segunda ambulancia, pudimos rescatarlos», sostuvo Castro.
Un video difundido en las redes sociales muestra el momento en el que los manifestantes en el puente Khora, el lugar donde ocurrió el suceso, obligan a bajar con violencia a los ocupantes de la ambulancia.
Bloqueos afectan alimentos y productores
El presidente Arce condenó los bloqueos de carreteras que, según dijo, están generando el encarecimiento y desabastecimiento de alimentos, además de perjuicios para los productores agropecuarios.
En una aparente alusión a Morales, Arce sostuvo que a quienes «empujan» a estas personas a movilizarse «no les interesa la vida» de los manifestantes, «solamente sus apetitos personales que ya han sido claramente establecidos mediante la normativa legal vigente en el país».
Los sectores leales al expresidente Evo Morales (2006-2019) bloquean carreteras desde el lunes sobre todo en Cochabamba para exigir que el político sea inscrito para participar en las elecciones generales del próximo 17 de agosto con un partido que no está habilitado porque perdió su personalidad jurídica.
También demandan la renuncia de Arce, al que responsabilizan por problemas económicos como la falta de dólares, el desabastecimiento de combustibles y la inflación.
Las autoridades nacionales denunciaron que las acciones de los manifestantes en las carreteras han dejado hasta el momento 50 heridos, entre policías y personal de salud, y también acusan a los movilizados de impedir el paso de ambulancias y apedrear vehículos de transporte público y privado.
Insistencia de Morales pese a restricciones
La Policía dispuso el viernes el repliegue de los agentes que cumplían funciones en el Trópico de Cochabamba, una de las principales zonas cocaleras del país que es el bastión político y sindical de Morales.
El exmandatario, que gobernó Bolivia en tres periodos, insiste en ser candidato, pese a que el Tribunal Constitucional ratificó recientemente que la reelección en el país está permitida «por una única vez de forma continua», sin la posibilidad de un tercer mandato.
Evo Morales perdió el liderazgo del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS), partido que fundó y encabezó por casi 30 años, en medio de las disputas con el presidente Arce desde finales de 2021, por su desacuerdo con las decisiones del Gobierno, el control de la formación política y su candidatura presidencial.
Por el conflicto reciente, el Ejecutivo demandó penalmente al expresidente por delitos como terrorismo y obstaculización de procesos electorales.
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